La noche del jueves se llenó de magia con Fitz and The Tantrums.
Redacción: Ana Cobos @_nosoybanana
Una de las iniciativas que tomó Ocesa para continuar con la emoción de asistir a conciertos -a pesar de la pandemia-, son los conciertos digitales. En su agenda, la promotora preparó para el 22 de octubre el show de Fitz & the Tantrums. Utilizando un escenario desde Los Ángeles California trajeron de manera remota buena música para que sus fanáticos de México pudieran disfrutar de algunos de sus éxitos.
La banda inició el concierto alrededor de las 20:35 PM, abriendo escenario con “Spark”. Michael Fitzpatrick, (vocalista), y Noelle Scaggs estaban muy enérgicos dándolo todo en el escenario, e invitando al público a cantar y bailar desde sus casas. Lo que me pareció una excelente iniciativa para la concientización del uso de cubrebocas, fue que Jeremy Ruzumna en los teclados, Joe Karnes en el bajo y John Wicks en la batería estaban portando un cubrebocas mientras sucedía el concierto.
Fitz and The Tantrums tocó canciones clásicas de su setlist como “Out of my league”, Hands up”, o la icónica “Handclap”, asimismo interpretaron algunos temas del último disco como “All the feels” e “I need Help”; entre otras que se fueron desenvolviendo durante la noche. Acompañándonos con algunas palabras de Michael, y un speech de agradecimiento en español de James King, el instrumentista múltiple de la banda, cerraron el concierto con “The Walker” y pidieron a sus fanáticos que siguieran cuidándose en tiempos de pandemia.
Terminado el concierto se presentó una pequeña entrevista al vocalista Michael Fitzpatrick sobre cómo ha sobrellevado el confinamiento y sus futuros planes para sacar nueva música. ¡No te pierdas los próximos shows de Ocesa con su serie Irrepetible!
